Brother, yo ya no sé qué más hacer, te lo juro por mi crosshair, entramos a Ascent y digo “chicos, vamos serios, utilidad, control de mapa, vamos juntos”, y Azazin en el primer segundo se ha comprado Shorty, ha pulsado W como si le debieran dinero en B main y ha gritado “AQUÍ EMPIEZA MI LEYENDA” por el micro, se ha muerto sin tirar una bala, ha tirado la spike al respawn y encima ha dicho que era un “mindgame nórdico inverso”, yo no sé qué significa eso, pero al siguiente round ha escrito “CONFÍEN EN LA ENERGÍA DEL UNIVERSO” y ha comprado Odin en eco, o sea, no me cuadra nada. Luego le digo que no pique sin utilidad, que aguante, que juegue en equipo, y me responde “yo no juego al Valorant, el Valorant juega a mí”, ¿CÓMO DISCUTES CON ESO? Me puse serio, saqué mi Vandal, marqué jugada en A, y cuando por fin hacemos algo decente, va y pone un TP en medio del site, se teleporta al spawn enemigo y muere instantáneamente gritando “¡TELETRANSPORTE AL DESTINO FINAL!”. Yo ya estoy jugando por instinto, me tiembla el aim, no sé si esto es Ranked o una simulación de la locura humana. Le pregunto si está troleando y me dice “yo no trolleo, yo creo caos para que florezca el orden”, y en ese momento entendí que había dejado de jugar al Valorant y estaba participando en un ritual cósmico dirigido por Otakar, el agente del descontrol. Al final ganamos porque el otro equipo se desconectó del servidor, probablemente por trauma psicológico, pero Otakar dijo que fue “la energía universal que se alinea cuando el alma se sincroniza con la spike”, y ahora mismo estoy dudando si reinstalar el juego o fundar una secta.